La boda tuvo lugar en mayo, el mes más encantador y hermoso, cuando la naturaleza despierta y el aire se llena de los aromas de los jardines florecientes.
El primer día comenzó con una ceremonia matutina que duró hasta la noche, donde la familia y los invitados se reunieron para una acogedora cena de bienvenida, conociéndose y disfrutando de la compañía mutua.La espléndida novia propuso un código de vestimenta especial para este día, inspirado en trajes nacionales, añadiendo un encanto especial a este momento. Las amigas de la novia participaron en la tradicional ceremonia de colocación de la guirnalda y la entrega de bendiciones, aportando su ternura y alegría a este momento.
El segundo día estuvo marcado por una ceremonia de matrimonio más formal, dirigida por un sacerdote hindú, simbolizando la sagrada unión de dos almas.
En el tercer día, los invitados disfrutaron de la práctica de yoga y se relajaron junto a la piscina, disfrutando de momentos divertidos después de los emocionantes días anteriores.
Nosotros, yo y mi equipo, tuvimos el placer de vivir en un hotel cercano y capturar cada momento de esta boda única. Desde los elegantes trajes hasta los emocionantes rituales, esta boda quedará en nuestra memoria como un viaje inolvidable al mundo mágico del amor y las tradiciones.
